
¿Pero qué es The Arlekin?
Según su creadora su marca juega con el concepto del bufón o pierrot (personajes teatrales del siglo XVI). "Con lo "atrayentemente visual", los cortes divididos por diferentes telas y colores saturados contrastados con el negro; los retazos que arman texturas, los botones, cierres y otros insumos que son más que eso y se convierten en un elemento visual potente en la prenda", enfatiza. No obstante aclara que su propuesta no sólo se centra en lo "teatral" o "extravagante". "Mi idea no es la del "disfraz" literalmente, más bien es tener una esencia y a partir de eso proponer nuevas variaciones que tengan la idea del arlequín, que a la vez son un poco más comerciales y cotidianas (como el uso mas sport, y "casual" )", explica.

Por ello su tela fetiche es el demin. "Siento que la mezclilla tiene infinidades de usos y propiedades técnicas que valen la pena explotar. Más que intervenir el material me gusta destrozarlo y crear nuevas texturas que se rescatan del reciclaje. La versatilidad es otro concepto importante, me gusta que las prendas sean además de audaces, funcionales. Me gusta jugar con lo reversible, lo desmontable, lo convertible", afirma Margarita.


Por ello su tela fetiche es el demin. "Siento que la mezclilla tiene infinidades de usos y propiedades técnicas que valen la pena explotar. Más que intervenir el material me gusta destrozarlo y crear nuevas texturas que se rescatan del reciclaje. La versatilidad es otro concepto importante, me gusta que las prendas sean además de audaces, funcionales. Me gusta jugar con lo reversible, lo desmontable, lo convertible", afirma Margarita.

La mujer The Arlekin
Para que una mujer sea seducida por The Arlekin, Margarita sugiere que debe tener actitud, seguridad, curiosidad y sofisticación. "No me gusta la idea de discriminar a mi usuario, me gustaría que una adolescente de 18 hasta una mujer de 30 o 40 comprara mis cosas", comenta.


Su proceso creativo
"El proceso creativo es casi mental (pero no azaroso). Me gusta tener muchas telas a mi alrededor y empezar a jugar, sólo cuando he tenido que realizar colecciones me pongo a bocetear y a buscar referentes y temas específicos, etc. Pero las fotos que he publicado en mi blog y flickr son prendas atemporales que no han necesitado de un proceso creativo tan minucioso. Creo que lo que más gatilla mi proceso creativo (en general) es el cuento de los retazos, los collages, los rompecabezas, el "desarmar" y volver "armar", el "destruir" y "reconstruir", y sinceramente esto se manifiesta por un asunto bastante íntimo de supervivencia personal.. Me he sentido "armada" y "destruida" mil veces en la vida y creo que muchos lo perciben así también.. y de cierta forma trato de expresarme a través de eso".

- ¿Qué le falta y que le sobra a la escena del diseño nacional y a tu marca?
Mmmm creo que sobran los diseñadores y faltan lugares para vender jajaja... De un tiempo a esta parte se saturó el campo y ahora existe mucha competencia. Hace 15 años nadie estudiaba la carrera porque se miraba en menos, y ahora literalmente "está de moda" estudiar diseño de vestuario. Te consideran "cool" por estudiarla. Creo que a la escena nacional (los nuevos "diseñadores emergentes independientes"), les falta sacarse un poco esa actitud " estilera" o de "onda" y dedicarse más a diseñar que a mostrarse a sí mismo como chicos "bacanes". Espero no caer en ese ambiente nunca.

A mi marca le falta tener a futuro un lugar establecido donde vender porque a pesar de que por el momento trato de meterme en ferias, uno siempre quiere su propio lugar, y comprarme un sitio .cl también para publicidad, porque vender por Internet se presta mucho para el plagio y está plagado de diseñadores vendiendo por acá. La verdad no me gusta mucho la idea de haberme hecho un blog o un flickr, pero la realidad es que si no empiezas por algo nunca vas a llegar hasta donde quieres, así que The Arlekin esta en pañales aún, con muchas ganas de seguir adelante pero todavía mostrándose tímidamente.


- ¿Qué le falta y que le sobra a la escena del diseño nacional y a tu marca?
Mmmm creo que sobran los diseñadores y faltan lugares para vender jajaja... De un tiempo a esta parte se saturó el campo y ahora existe mucha competencia. Hace 15 años nadie estudiaba la carrera porque se miraba en menos, y ahora literalmente "está de moda" estudiar diseño de vestuario. Te consideran "cool" por estudiarla. Creo que a la escena nacional (los nuevos "diseñadores emergentes independientes"), les falta sacarse un poco esa actitud " estilera" o de "onda" y dedicarse más a diseñar que a mostrarse a sí mismo como chicos "bacanes". Espero no caer en ese ambiente nunca.

A mi marca le falta tener a futuro un lugar establecido donde vender porque a pesar de que por el momento trato de meterme en ferias, uno siempre quiere su propio lugar, y comprarme un sitio .cl también para publicidad, porque vender por Internet se presta mucho para el plagio y está plagado de diseñadores vendiendo por acá. La verdad no me gusta mucho la idea de haberme hecho un blog o un flickr, pero la realidad es que si no empiezas por algo nunca vas a llegar hasta donde quieres, así que The Arlekin esta en pañales aún, con muchas ganas de seguir adelante pero todavía mostrándose tímidamente.

Sus vitrinas en el futuro
En la mía, pero me gustaría viajar a futuro, conocer otras vitrinas afuera. Acá estamos a años luz de lo que está pasando afuera, nos llega el goteo y nos conformamos con eso. Quiero ampliar mi visión y conocer nuevas visiones también. Además de mi propia marca consolidada y todo eso no es lo único que me interesa como diseñadora. No me gusta la idea de atarme a una tienda o boutique, también me gusta el diseño teatral, el maquillaje de efectos especiales, meterme en productoras de t.v, etc. De hecho en estos momentos me encuentro trabajando con una amiga diseñando uniformes para un resto-bar y la verdad en estos momentos sólo quiero ganar experiencia de todo lo que venga y no encasillarme. Quiero ser versátil y tener la certeza que puedo diseñar "moda", armar un personaje de teatro hasta indumentaria de trabajo.

(Fotos gentileza de The Arlekin)
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