Sumergirse en los mundos creativos de los diseñadores, entrar en sus cabezas al estilo de "Quieres ser John Malkovich" ha sido, desde el principio, el motor de mi blog. Por eso, el recorrido que tuvimos ayer por la mañana por algunas tiendas del barrio Palermo no fue sólo entretenido, sino muy motivador. Suban conmigo al piso 7 y medio y compenetrémonos en el universo de Hermanos Estebecorena, Mariana Dappiano, Dorina Vidoni y Nadine Zlotogora.
Se abre el ascensor: Hermanos Estebecorena
A las 11.00 de la mañana -algo pasadas- el grupo de periodistas que integramos la "comitiva Pro Tejer - Inti" ingresamos a la tienda de los Hermanos Estebecorena (Javier y Alejandro). El espacio, muy parecido a una sastrería clásica, llama la atención por su impronta "retro", no obstante, sólo basta con que uno mueva los percheros, para que esa asociación se diluya de manera natural y sin forzar, en las formas ergonómicas y modernas de esta marca de ropa masculina.
Javier Estebecorena fue el anfitrión del espacio y nos contó sobre sus inicios (en la arquitectura y la ingeniería), la diversidad creativa de su marca (que realiza consultorías a empresas de lo más increíbles, creo que habló algo de un diseño de un revolver o algo así) y esta lógica de ir "mejorando de a poco" de la mano de sus clientes (que Javier señaló están llenos de buenas ideas para aportar). Con 10 años en el mercado, sus prendas se caracterizan por tener una silueta clásica con un interesante trabajo del detalle con aires retro, que les ha permitido vender en New York, Madrid y Málaga, además de varias provincias del interior. Una de las cosas que más me llamó la atención de la conversación con ellos, fue la respuesta que me dio Javier sobre la identidad argentina expresada en su marca -la grabé y espero subir pronto el video editado y todo-, junto con su elasticidad para trabajar las colecciones (son capaces de adecuarse a las contra temporadas sin caer en un síncope). A ello se sumó que nos contó que desde hace un tiempo trabajan con un estilista, quien al igual que un productor musical, los ayuda a encontrar los énfasis de cada colección y los cables a tierra, que los reconectan con sus clientes y el entorno ("de tanto estar con el objeto pierde de visa el contexto", afirmaba). Sin duda una parada obligatoria para cualquier hombre que se considere "hombre de mundo". Ah! sus calcetines en caja de metal con indicaciones de uso, son un must have absoluto.
Alejandro y Javier EstebecorenaBajando la cabeza para circular por el pasillo de Mariana Dappiano
Un pequeño bus nos dejó en la puerta de la tienda Mariana Dappiano, quien de cuerpo presente nos contó sobre su marca -con 10 años también en el mercado- en la que el trabajo del textil y la "generación de productos orgánicos desde la geometría pura" son sus rasgos distintivos. De hecho Mariana nos dijo que no le gustaban las telas planas, le daban claustrofobia y que su principal motivación era lograr que la prenda se moviera y que uno pueda moverse con ella. Todo ello asociado a un público que, aunque tiene los recursos para comprarse lo que quiera (de 30 a 60 años), prefiere a Mariana Dappiano porque no sólo le permite diferenciarse, sino también porque se siente cómodo con los valores que representa.
Entrando por la primera puerta: Dorina Vidoni (cuidado con la cabeza)
Lamentablemente Dorina Vidoni no pudo estar. Sin embargo, su encargada comercial, la de productos y el de comunicaciones (uno para cada cargo, por si no se entendió), se encargaron de contarnos sobre la estética de esta diseñadora y su trabajo, en que la comodidad es la reina y soberana.
La verdad, quedé encantada con su trabajo de las formas, la suavidad de sus telas, el trabajo de moldería y la estética de sus colecciones, que exudan confort y elegancia. Fue tanto, que contra todo pronóstico, me compré una chaqueta exquisita gris, que me calzó perfecto. Lo que no es casualidad, sino que todo un arte, ya que Dorina se obsesiona por lograr beneficiar el cuerpo de su clienta, buscando el calce perfecto. Ello de la mano de una profunda reflexión sobre cómo su marca se hibrida de diferentes culturales. En el fondo: una marca del siglo XXI donde el punto que nos une es esta vocación por una identidad universal, sin perder los valores locales. Alucinante.
Alto. Cambio de sala. Entramos al universo de Nadine Zlotogora
Sin duda uno de los diseñadores que más me ha llamado su personalidad, ya sea por la convicción con que se expresa y lo consecuente de su mensaje es Nadine Zlotogora. Cuando entramos a su tienda -última parada del recorrido- y luego la escuchamos, no cabía duda... Todo cuadraba, las figuras, los colores, el suave olor dulzón y la música francesa. Ella ha logrado crear un universo muy personal, pensando en crear prendas y objetos para heredar, en los que el consumidor se sienta atraído afectivamente, enamorado de esta historia que partió contando Nadine, pero en la que cada cual, le pone un desenlace. Su manufactura es el resultado de un cuidado trabajo de técnicas y mezclas textiles, que hacen de sus prendas verdaderas piezas de arte capaces de seducir a un cliente, que no es un consumidor impulsivo, sino uno reflexivo, que se conecta con el mundo de Nadine y lo resignifica.
Una de las curiosidades de su marca es que nunca separa las temporadas, sino que va agregando continuamente prendas en sus percheros, lo que anula el concepto de liquidación. "Vamos a un camino en que la moda no exista y que todo se use... El tirar no es parte de mi idiosincracia, por eso prefiero el reuso", enfatizó Nadine al explicar la esencia constitutiva de su marca. Agregando que ella era "fiel por naturaleza", por lo tanto le era inconcebible, estar en medio de una temporada, y ya estar planificando otra. Su tienda, un imperdible... A Nadine le compré cada una de sus palabras, porque no cabe duda que le salen de las entrañas.
De regreso al piso 1
Tipo dos de la tarde ya agotados, nos fuimos a almorzar a la espera de la primera jornada del BAF Week (espero lograr escribir algo mañana, ahora estoy casi a punto de desmayarme). En mi caso, feliz de haber tenido la oportunidad de conocer en persona a casi todos estos diseñadores, que con tesón, profesionalismo y mucho talento están haciendo de Argentina una país de la moda y la vanguardia. Ahora mismo, antes de dormir, rezaré para que a nosotros -Chile- se nos pegue este "Espíritu Santo" y aprendamos de ell@s.Lee también mi primer día en la Semana de la moda porteña
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