Un buen indicador del estado de desarrollo de una escena de la moda son los eventos que se realizan en torno a ella y que no sólo la conectan consigo mismo, sino con mundos tan -"aparentemente"-lejanos como el de la ciencia. En noviembre 2016, en Buenos Aires, Argentina, comprobamos que la ecuación ciencia y moda es posible, gracias a los talleres, charlas, exhibiciones, conferencias y un desfile fruto de la colaboración entre científicos y diseñadores de moda, que se llevaron a cabo en el Centro Cultural de la Ciencia (C3). Para conocer más detalles de esta inspiradora iniciativa, conversé con una de sus gestoras Guadalupe Díaz, quien me contó los alcances de juntar dos sectores, cuya colaboración resulta vital en el siglo XXI.
"La idea del Centro Cultural de la Ciencia es, entre otras, contar la ciencia de lo cotidiano, esa ciencia con la que convivimos y muchas veces no la conocemos o sabemos poco de ella. Estamos rodeados de textiles y prendas, muchas de ellas con un desarrollo científico y tecnológico detrás. A lo largo del mes de noviembre nos propusimos juntar la ciencia y del diseño de indumentaria y textil no para mostrar que son dos mundos distintos, sino que son parte de un mismo mundo donde la creatividad y la experimentación son un punto común entre ambas disciplinas".
"Sonrío frente a tu pregunta porque... aquí en Argentina ocurre lo mismo. Por supuesto, no es una generalidad, pero sí ocurre mucho esto de 'fruncir el ceño'. Sin dudas hay un aspecto frívolo y comercial en alguna áreas de la industria de la moda. Sin embargo, poniendo la atención en el diseño y el trabajo de los diseñadores, curiosos por definición al igual que todo científico, logramos invitar a ambos (científicos y diseñadores) a charlar e intercambiar saberes para encontrar algo nuevo, desconocido y atrapante a partir de lo cual pudieran diseñar una prenda. Nadie se negó, al contrario! Aceptaron inmediatamente entre risas también y algo curiosos justamente por saber de qué se iba a tratar una invitación tan... inusual".
"El proceso partió de un encuentro que se realizó en el Centro Cultural de la Ciencia. Convocamos a científicos y diseñadores a conversar un ratito para que a partir de esa conversación (en la que se hablaba del tema de investigación científica del especialista, sobre todo), se creara un punto de partida. Estos primeros encuentros ocurrieron tres meses antes de tener que tener la prenda o traje (o lo que sea que fueran a diseñar!) lista para el desfile que íbamos a hacer el sábado 26 de noviembre en el C3. Las reuniones dieron lugar a amistades que trascendieron y superaron nuestras expectativas. A partir de ese primer encuentro, diseñadores fueron a laboratorios de investigación y científicos a talleres de diseño. Soñábamos algo así, pero el proceso fue superador. Hay una próxima colección que promete nombrar a cada prenda con el nombre de galaxias. Otra diseñadora dijo querer hacer una colección entera a partir de un tema científico particular".
"El desarrollo de la 'ciencia de la moda' como bien mencionás es fundamental para la industria. Sin ir más lejos, la industria textil es una de las más contaminantes. Con lo cual, desde ese punto de vista, creemos que vale la pena detenernos a pensar si no sería momento de promover mayor investigación científica en búsqueda de soluciones o alternativas. Pero eso es sólo un aspecto y la investigación científica puede dar lugar a nuevos textiles con funcionalidades específicas, por mencionar otro ejemplo.
El Centro Cultural de la Ciencia (nuestro museo nacional interactivo de ciencias) es un espacio abierto al público general en el cual la comunidad científica es particularmente activa (muchas veces los científicos dan charlas, talleres o nos brindan asesoramiento para contenidos o abordaje de algún aspecto científico particular). Desde este punto de vista, el C3 no puede, por poner un ejemplo, dar subsidios para investigación. Sin embargo, el C3 sí puede comunicar (de hecho, lo hará) la importancia y repercusión que esta iniciativa tuvo y la cantidad de preguntas "hacia el futuro" que promovió".
"Frente al interés y los resultados que obtuvimos, efectivamente pensamos en realizar futuras ediciones de este encuentro de moda y ciencia. Sin embargo, la posibilidad concreta de realizarlo dependerá de varios factores y será una decisión estratégica en la cual intervienen muchos actores. Estamos próximos a saber qué ocurrirá, pero es una respuesta que aún no puedo dar con certeza. Esperamos que pueda volver a hacerse".
Los motivos para desarollar una iniciativa de ciencia y diseño
"La idea del Centro Cultural de la Ciencia es, entre otras, contar la ciencia de lo cotidiano, esa ciencia con la que convivimos y muchas veces no la conocemos o sabemos poco de ella. Estamos rodeados de textiles y prendas, muchas de ellas con un desarrollo científico y tecnológico detrás. A lo largo del mes de noviembre nos propusimos juntar la ciencia y del diseño de indumentaria y textil no para mostrar que son dos mundos distintos, sino que son parte de un mismo mundo donde la creatividad y la experimentación son un punto común entre ambas disciplinas".
En esta charla el diseñador Martumanian y la bióloga Noelia Carmona hablaron sobre las capas de la tierra y las olas de la Patagonia |
Cómo lograron que los científicos se animaran a participar en este proyecto dado el discurso frívolo que gira en torno a la moda
"Sonrío frente a tu pregunta porque... aquí en Argentina ocurre lo mismo. Por supuesto, no es una generalidad, pero sí ocurre mucho esto de 'fruncir el ceño'. Sin dudas hay un aspecto frívolo y comercial en alguna áreas de la industria de la moda. Sin embargo, poniendo la atención en el diseño y el trabajo de los diseñadores, curiosos por definición al igual que todo científico, logramos invitar a ambos (científicos y diseñadores) a charlar e intercambiar saberes para encontrar algo nuevo, desconocido y atrapante a partir de lo cual pudieran diseñar una prenda. Nadie se negó, al contrario! Aceptaron inmediatamente entre risas también y algo curiosos justamente por saber de qué se iba a tratar una invitación tan... inusual".
Desfile de presentación de la colaboración entre científicos y diseñadores en el C3 |
Cómo fue el proceso / metodología de trabajo realizado entre diseñadores y científicos
"El proceso partió de un encuentro que se realizó en el Centro Cultural de la Ciencia. Convocamos a científicos y diseñadores a conversar un ratito para que a partir de esa conversación (en la que se hablaba del tema de investigación científica del especialista, sobre todo), se creara un punto de partida. Estos primeros encuentros ocurrieron tres meses antes de tener que tener la prenda o traje (o lo que sea que fueran a diseñar!) lista para el desfile que íbamos a hacer el sábado 26 de noviembre en el C3. Las reuniones dieron lugar a amistades que trascendieron y superaron nuestras expectativas. A partir de ese primer encuentro, diseñadores fueron a laboratorios de investigación y científicos a talleres de diseño. Soñábamos algo así, pero el proceso fue superador. Hay una próxima colección que promete nombrar a cada prenda con el nombre de galaxias. Otra diseñadora dijo querer hacer una colección entera a partir de un tema científico particular".
La importancia dek desarrollo de la "ciencia de la moda" para el crecimiento de la industria
"El desarrollo de la 'ciencia de la moda' como bien mencionás es fundamental para la industria. Sin ir más lejos, la industria textil es una de las más contaminantes. Con lo cual, desde ese punto de vista, creemos que vale la pena detenernos a pensar si no sería momento de promover mayor investigación científica en búsqueda de soluciones o alternativas. Pero eso es sólo un aspecto y la investigación científica puede dar lugar a nuevos textiles con funcionalidades específicas, por mencionar otro ejemplo.
El Centro Cultural de la Ciencia (nuestro museo nacional interactivo de ciencias) es un espacio abierto al público general en el cual la comunidad científica es particularmente activa (muchas veces los científicos dan charlas, talleres o nos brindan asesoramiento para contenidos o abordaje de algún aspecto científico particular). Desde este punto de vista, el C3 no puede, por poner un ejemplo, dar subsidios para investigación. Sin embargo, el C3 sí puede comunicar (de hecho, lo hará) la importancia y repercusión que esta iniciativa tuvo y la cantidad de preguntas "hacia el futuro" que promovió".
Proyecto conjunto a partir de investigaciones científicas realizadas en la Universidad Maimónides y en los laboratorios de “Tramando” del diseñador Martín Churba |
La proyección de la colaboración entre ciencia y moda fruto de su iniciativa
"Frente al interés y los resultados que obtuvimos, efectivamente pensamos en realizar futuras ediciones de este encuentro de moda y ciencia. Sin embargo, la posibilidad concreta de realizarlo dependerá de varios factores y será una decisión estratégica en la cual intervienen muchos actores. Estamos próximos a saber qué ocurrirá, pero es una respuesta que aún no puedo dar con certeza. Esperamos que pueda volver a hacerse".
(Fotos gentileza del Centro Cultural de la Ciencia / Créditos fotos de campaña
Fotografía: Gisela Filc - Dirección de arte: Florence Arguello - Producción: Sol Albano
Foto principal: Colaboración entre la científica Silvana Sede. especialista en Botánica, y la
diseñadora de indumentaria Nadine Zolotogora )
COMMENTS