[MODA ARGENTINA] Crear una marca de moda de triple impacto fue lo que movilizó al arquitecto argentino, Leandro Caamaño, a desarrollar Juaga en 2018. Su foco fue centrarse en dos problemáticas: la contaminación ambiental y la desigualdad social, pero siempre con el foco en ser escalable para conseguir el menor impacto en el medio ambiente, pero a la vez generar oportunidades de aprendizaje y trabajo digno a personas en situaciones vulnerables. Esa filosofía no solo la aplicó en sus productos y procesos, sino también en sus proveedores de servicios e insumos, lo que les ha valido diversos premios y reconocimientos. Hoy conoceremos de la mano de Leandro, más detalles de su propuesta.
La propuesta de Juaga
Conceptos sociales de interés en la actualidad, así como el triple impacto (económico, ambiental y social) son los cimientos de la propuesta de Juaga.
"Cuando una marca establece de entrada qué valores son innegociables, todas las decisiones posteriores van a tener que hacer bandera de ello", enfatiza Leandro.
En ese sentido, señala, que no es lo mismo tomar un tema social para diseñar una colección, que involucrarse activamente como parte del cambio, porque el primero solo va a impactar a nivel visual, el segundo lo hará en la sociedad, las personas, y también en el modelo de negocio de la empresa, eligiendo tomar partido y realizar los cambios que creen necesarios que la industria de la moda necesita.
"En nuestra primera colección de indumentaria, que realizamos en colaboración con las hermanas Bianca y Ludmila Di Pasquale, partimos de una pregunta que nos resulta fundamental que el espectador se plantee: '¿Y si mañana el mundo se acabara y tuvieras tan solo unas pocas horas para poder hacer lo que en todos estos años no te animaste a hacer?' Lo que surja de esta pregunta en tu imaginación, puede que se acerque a cómo te gustaría ser y vivir en este mundo, y esa es la opción que queremos brindar y el cambio que deseamos promover", enfatiza.
El proceso creativo de Juaga
En septiembre de 2021, Juaga trasladó su taller de la la Unidad Penitenciaria Nro 1 de Olmos a la Unidad 26 de la misma localidad, y a su vez, consiguieron que los internos que trabajaban con ellos desde los inicios pudieran continuar haciéndolo, ya que pretenden que se mantengan en la etiqueta cuando recuperen su libertad.
En esa línea, el proceso creativo supone llevarles los diversos materiales de descarte que utilizan para sus confeccionar los productos de Juagua (banners plásticos, caucho de rodados vehiculares, mangueras contra incendio, espuma de polietileno, etc) y negociar cuál es la mejor manera de producirlo, probando su resistencia, estética, etc, hasta llegar a un “acuerdo” entre lo que “pueden” y lo que “quieren” realizar. Todo ello en el entendido que no existe ni un manual, ni bibliografía en la moda para utilizar ciertas materias primas no convencionales.
"Nuestros trabajadores están muy comprometidos con su trabajo, y cada residuo que llevamos al taller es un nuevo desafío para ellos y para nosotros, pero cuando al fin damos con los resultados buscados, saber que logramos hacer algo que quizás no se hizo antes, y que vamos a estar devolviendo a la vida un material que iba a ser desechado, la satisfacción es enorme, y ellos particularmente sienten un orgullo propio enorme por saber consiguieron alcanzar con éxito un desafío que al principio parecía imposible", detalla Leandro.
Medir la huella ambiental para Juaga
Leandro reconoce que una de sus grandes deudas es medir de manera más precisa el impacto negativo que logran evitar. Pero lo anterior lo compensan a través de acciones muy pensadas y diseñadas para evitar impacto e incluso generar un impacto positivo.
"Al extender la vida útil de muchos materiales que iban a ser considerados basura revertimos el impacto a la hora de fabricar nuestros accesorios, pero también necesitábamos ofrecer una opción de ropa sostenible, ya que incluso, vestirse es una necesidad fundamental, por lo que la reutilización de residuos no nos resultó muy viable por el momento. Por eso realizamos un estudio de empresas textiles de fabricación nacional, en busca de sistemas productivos sustentables, y que además la calidad de sus textiles sea muy alta. Las encontramos, y realizamos nuestra primera colección de ropa sostenible.
Consolidamos una alianza con la empresa textil Santista, quienes realizan y promueven prácticas productivas sustentables, y su sello Good Denim está presente en nuestras prendas.
Para minimizar la huella de carbono, priorizamos a emprendedores locales, para brindarnos distintos tipos de servicios, quienes además no deben realizar prácticas que perjudiquen el medio ambiente y deben respetar los derechos laborales de sus empleados. Así mismo, en lo posible buscamos talleres que realicen algún tipo de inclusión social", explica. 
El trabajo con personas privadas de libertad en Juaga
Leandro comenta que en los primeros años de trabajo dentro dentro de la cárcel más superpoblada de Argentina, la Unidad Penitenciaria Nro 1 de Olmos, realizaban capacitaciones de marroquinería con materiales reutilizados y participaba cualquier interno que quisiera aprender el oficio. "Como no podíamos emplear a todos, nuestra idea siempre fue generar herramientas que les permitieran un desarrollo económico futuro, pero logramos que uno de los cursantes se incorporara al equipo de trabajo, y hasta el día de hoy sigue trabajando con nosotros", relata.
En 2022 comenzaron una capacitación de creación de emprendimientos y otra de habilidades técnicas de costura y textil en la U.26 en coordinación y apoyo de la Red Creer, el Instituto Malpeli y la Dirección de Promoción e Inclusión Socio Laboral del Servicio Penitenciario Bonaerense.
"Las clases son teórico prácticas, y están enfocadas en brindarles herramientas para que una vez que recuperen su libertad puedan desarrollarse de manera autónoma, ya que como sabemos, a las personas que cuentan con antecedentes penales les es más difícil conseguir un empleo. Si está a nuestro alcance, incorporamos algún nuevo trabajador luego concluidas las capacitaciones.
Algunas de las personas que pasaron por nuestros cursos ya recuperaron su libertad y continuamos el vínculo con ellos. Estamos bastante pendientes de cómo avanza su vida en libertad, colaborando con ellos en lo que podemos, vinculándolos con algunas instituciones, empresas, asesorías, etc, incluso con alguno de ellos formamos un vínculo de amistad.
Hasta el momento no contamos con un taller fuera de la cárcel, pero ya comenzamos a hacer algunas inversiones de compra de maquinarias, que nos permita estar preparados para cuando nuestros trabajadores accedan a algún beneficio de salidas laborales transitorias o le concedan su libertad", detalla. 
El futuro de Juaga
El compromiso futuro de Juaga es seguir escalando desde el triple impacto y demostrar que se puede crecer haciendo las cosas de la mejor manera posible, donde la rentabilidad no sea el único foco del negocio, ya que su propósito es tan importante como la rentabilidad de la marca.
"Estamos trabajando para posicionarnos dentro de la industria de la moda como una marca de la nueva generación de empresas, con ideologías fuertes que pretenden promover el respeto y responsabilidad a la hora de consumir, entendiendo la influencia que la moda tiene ante la sociedad, ya que los hábitos de consumo son los que guían el rumbo que las empresas toman.
Nuestra meta es replicar Juaga en otros países, ya que la problemática que trabajamos es común en todo el mundo, exportando innovación social y ambiental aplicada al diseño", concluye.
¿Dónde comprar Juaga? En su tienda online.
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