Halia: accesorios que tributan los océanos desde el upcycling

[ACCESORIOS CHILENOS] El descontento que le provocaba el exceso de basura sumado a su pasión por el diseño motivó a María José Martínez a crear su marca de accesorios Halia en la que el suprareciclaje de botellas plásticas se mezcla con elementos comunes como el acero inoxidable, perlas de río, jade o cuarzo. "Halia es una ninfa protectora de los océanos, de ahí el nombre, pues es en el mar donde mayoritariamente terminan los desechos plásticos", relata. Hoy nos contará cómo le ha ido con esta apuesta creativa. 

La propuesta de Halia

María José describe Halia como una revolución hacia la industria de la moda. "Un cambio de perspectiva amigable con el planeta es una deuda pendiente desde nuestro sector, por eso fabrico joyas que son un objeto de deseo. Desde la premisa de que 'la basura es un error de diseño', cada una de nuestras piezas demuestra que es posible el cambio, que es posible trabajar con el problema, rediseñar. Es un cambio de paradigma que dice que el plástico ya no es basura es materia prima, para mí es el nuevo oro", afirma. 

Desde esta perspectiva, en su proceso creativo tuvo que desterrar la idea de que el plástico era desecho. "Tras muchas pruebas de ensayo y error he ido conociendo el material, utilizando sus propiedades en favor del proceso creativo. Trabajo principalmente con polietileno de alta densidad o PEAD (correspondiente a botellas de shampoo, cloro, cif, detergente, entre otros) que es altamente reciclable, moldeable y tiene un acabado suave, característica que priorizo en un accesorio", detalla.

Por otra parte destaca que dado lo liviano del material puede hacer maxi aros que no cansan las ojeras y que el PEAD como no es fácil de teñir utiliza el color original de las botellas y realiza marmoleados. 

"También trabajo con PET y PEBD, correspondiente a botellas de bebidas y bolsas plásticas. Cada uno tiene una composición química diferente por lo que siempre intento abrirme a las posibilidades, estudiando previamente sus características", añade.

El desafío de la sostenibilidad para Halia

María José tiene claro que ser sostenible supone aspectos económicos, sociales y medioambientales. Por lo que enfrenta este desafío desde esa triada.

"Creo que es evidente que estamos en deuda con las generaciones futuras respecto al cuidado de los recursos naturales, y es ahí donde queremos poner el foco. Entonces lo que hacemos es tomar aquello que normalmente sería basura, dentro de un sistema lineal y lo reinsertamos para que siga circulando (reciclamos botellas plásticas para convertirlas en joyas). A medida que vayamos creciendo queremos aportar en organizaciones que se dediquen a la protección de ballenas y plantación de árboles, que son dos grandes acciones contra la urgencia climática", explica.

En cuando al aspecto social comenta que el reciclaje es una gran generador de empleos, al que además se le puede dar un foco inclusivo trabajando, por ejemplo, con personas con discapacidad, personas LGBTQ+ o del género femenino. "Todo esto considerando la rentabilidad de la empresa para que sea viable y sostenible en el tiempo", insiste.

¿Por qué la joyería tiene que sumarse a la moda circular? ¿Cómo te desafía ese paradigma creativo y de negocios en tu desarrollo como marca?

"La joyería forma parte del vestir cotidiano, que además es percibido como un objeto de valor o como un tesoro; nos ayuda a comunicar, a dar importancia a una ocasión o puede ser una pieza de arte. Depende de la mirada de cada usuario/cliente, por eso es indispensable dentro de la moda circular.

Quizás el mayor desafío es de qué manera influimos en el usuario tradicional, el que todavía no es un cliente especializado en moda circular. De qué forma cambiamos la mirada del plástico como basura, al plástico como una joya o un objeto de valor que puede tener muchas vidas. Y como todo entra por la vista, nuestros productos se encargan de brillar por si solos, los compran por ser bellos, no circulares. Ahí se genera un punto de inflexión, ya sea en formato presencial o virtual. Pasas de comprar algo bonito, a comprar algo bonito y que ayuda al planeta, es el paquete completo o como dicen las usuarias es perfecto. 

Llevar unos Halia es una instancia para conversar no sólo de diseño, sino también sobre ambiente, contaminación, reciclaje y es una oportunidad que no podemos dejar pasar. Es nuestro deber tomar acción y sumar a quienes nos rodean, al menos, invitarlos a reflexionar. Necesitamos que exista mercado y competencia circular para poder consumir de manera responsable. Ese paradigma nos desafía constantemente y es el que nos ayuda a crecer como marca, es nuestro motor".

¿El futuro de Halia?

Un gran futuro es el que imagine María José para Halia. "Creo que es indispensable convertirnos en un referente dentro del mercado nacional, ser reconocidos como una marca de slow fashion sostenible y moderna. Imagino un gran equipo detrás, nuevos productos, colaboraciones, estar en tiendas a nivel nacional, ser un aporte en organizaciones ambientalistas, hacer foco en la educación cada vez que sea posible. Creo que para influir en el entorno, tenemos que ser grandes", concluye.

¿Dónde comprarla? En su cuenta en Instagram.

Instagram de Halia

(Fotos gentileza de Halia)