[MODA INFANTIL] (Por Soledad Torres D*) Amante del lino, Isidora Rodríguez creó una línea de vestuario infantil sobre la base de telas nobles y la confección de calidad, para favorecer así un consumo más consciente. Su marca es OhCotton y nació en plena pandemia, mientras esperaba la llegada de su hija Elena. Te invito a conocerla en detalle.
Año 2021, Isidora, mamá de Martín (8) y José (6), estaba esperando a su tercera hija, Elena. “Todo partió en el embarazo, viviendo en cuarentena encontrar ropa de guagua sin poliester, idealmente confeccionada con telas nobles, y que además me gustara a primera vista no era fácil. Lo que miraba por internet no me agradaba. Quería prendas más delicadas, suaves al tacto, que no provocaran picazón en su piel… porque mis hijos mayores eran de piel delicada y el material con que está hecha la ropa era un tema”.
Isidora reconoce que instintivamente, y recordando su experiencia en trabajo textil para la marca Karin Coo años antes, se zambulló en Pinterest buscando ideas, referentes de marcas españolas, y sin meditar mucho… encargó telas y se puso a coser. Así de espontáneo.
“Tenía una máquina de coser de la época de la universidad, imagínate. Sabía usarla, pero la verdad no tenía idea de patrones o conversión de medidas, y ese tipo de información es vital para desarrollar una línea de ropa ¿Cómo lo hice? Aprendí sola, investigando en internet, mirando cientos de tutoriales, equivocándome, conversando con costureras de toda la vida, usando como modelos a mis propios hijos. Las primeras prendas que hice daban risa, obvio… tenía mucho que aprender”, recuerda Isidora con cierta nostalgia, mientras sostiene en sus manos esos primeros modelos de la marca OhCotton.
Ciento por ciento autodidacta, y ciento por ciento honesta en su proyecto, esta madre y diseñadora capitalina continuó cortando telas, creando sus propios patrones y cosiendo en casa, hasta que dio con el tipo de ropa que quería hacer. Lo que nació como una idea para vestir a su hija Elena, de pronto era un proyecto para desarrollar su primera línea de vestuario infantil, confeccionado con telas nobles y libres de poliester. Así nace OhCotton.
Al momento de conceptualizar la marca, Isidora quiso ir más allá y crear una línea de ropa infantil menos plástica, menos desechable. Amigable con el medioambiente desde la elección de la materia prima (solo telas puras y sin porcentaje de poliester). Respetuosa con la piel, que no provocara molestias ni reacciones dérmicas. Que se adaptara al frío y al calor, lo que le permitiría diseñar prendas atemporales, y favorecer de esa forma un consumo más responsable y consciente. “Un vestido OhCotton lo usas en verano feliz, y en otoño solo le tienes que sumar una panty o calza, de verdad lo puedes usar todo el año, y no estar comprando ropa a cada rato”.
Recalca también lo importante que es elegir prendas básicas y de buena calidad y confección. “Te van a durar más tiempo, no pasan de moda y evitas el sobreconsumo. Esos son los valores detrás de OhCotton”. Cuenta que, si bien en periodos de más demanda, acude a la ayuda de otra persona, ella está a cargo de todo el proceso. “No delego la confección total, sigo siendo yo la que corta las telas, pega botones, repasa detalles, y si necesito rehacer algo porque no pasa mis parámetros de calidad, lo hago. Prefiero eso, que vender algo que no me deja ciento por ciento contenta”.
Reconoce que tampoco le interesa la producción en masa. Quiere ocupar el recurso necesario, no consumir de más, ni telas ni energía. “OhCotton no aspira a la masividad, prefiero contar con diseños interesantes y acotados. Me gusta la calidad de lo que hago y entrego, por eso siento sería complejo pensar en llegar a procesos productivos masivos. No me gustaría cambiar la calidad de mi ropa ni dejar de revisar cada prenda con mis propias manos”.
El nacimiento de OhCotton
Soy una convencida de que la pandemia por Covid-19, que parece que fue hace tanto tiempo, despertó un montón de iniciativas interesantes, autogestionadas y con el plus de hecho a mano, hecho a pulso, hecho en condiciones de encierro, y bien hecho. Fue lo primero que pensé cuando conocí a Isidora Rodríguez (35), diseñadora de la Pontificia Universidad Católica, y me contó la historia de su marca OhCotton.Año 2021, Isidora, mamá de Martín (8) y José (6), estaba esperando a su tercera hija, Elena. “Todo partió en el embarazo, viviendo en cuarentena encontrar ropa de guagua sin poliester, idealmente confeccionada con telas nobles, y que además me gustara a primera vista no era fácil. Lo que miraba por internet no me agradaba. Quería prendas más delicadas, suaves al tacto, que no provocaran picazón en su piel… porque mis hijos mayores eran de piel delicada y el material con que está hecha la ropa era un tema”.
Isidora reconoce que instintivamente, y recordando su experiencia en trabajo textil para la marca Karin Coo años antes, se zambulló en Pinterest buscando ideas, referentes de marcas españolas, y sin meditar mucho… encargó telas y se puso a coser. Así de espontáneo.
“Tenía una máquina de coser de la época de la universidad, imagínate. Sabía usarla, pero la verdad no tenía idea de patrones o conversión de medidas, y ese tipo de información es vital para desarrollar una línea de ropa ¿Cómo lo hice? Aprendí sola, investigando en internet, mirando cientos de tutoriales, equivocándome, conversando con costureras de toda la vida, usando como modelos a mis propios hijos. Las primeras prendas que hice daban risa, obvio… tenía mucho que aprender”, recuerda Isidora con cierta nostalgia, mientras sostiene en sus manos esos primeros modelos de la marca OhCotton.
Ciento por ciento autodidacta, y ciento por ciento honesta en su proyecto, esta madre y diseñadora capitalina continuó cortando telas, creando sus propios patrones y cosiendo en casa, hasta que dio con el tipo de ropa que quería hacer. Lo que nació como una idea para vestir a su hija Elena, de pronto era un proyecto para desarrollar su primera línea de vestuario infantil, confeccionado con telas nobles y libres de poliester. Así nace OhCotton.
El lino como material central de OhCotton
El lino es un amor de familia y se lleva en la sangre, dice Isidora. “Recuerdo que mi papá amaba la ropa hecha de lino, y yo también siempre he sido una fanática. Me encanta el peso de la tela, como cae, los pliegues que se forman, su color poco estridente. Es un material liviano, suave, que no provoca alergia en la piel, y que además puedes usar todo el año. Por eso la elección del tipo de telas que iban a dar vida a OhCotton no fue difícil, obvio que sería de lino”.Al momento de conceptualizar la marca, Isidora quiso ir más allá y crear una línea de ropa infantil menos plástica, menos desechable. Amigable con el medioambiente desde la elección de la materia prima (solo telas puras y sin porcentaje de poliester). Respetuosa con la piel, que no provocara molestias ni reacciones dérmicas. Que se adaptara al frío y al calor, lo que le permitiría diseñar prendas atemporales, y favorecer de esa forma un consumo más responsable y consciente. “Un vestido OhCotton lo usas en verano feliz, y en otoño solo le tienes que sumar una panty o calza, de verdad lo puedes usar todo el año, y no estar comprando ropa a cada rato”.
La sostenibilidad para OhCotton
Sobre la tendencia hacia una industria de la moda más sostenible, explica que se puede partir desde los gestos más sencillos, como hacer circular la ropa de hermanos mayores a menores, entre primos o incluso escogiendo comprar ropa reutilizada. “En mi caso la reutilización es un gesto de conciencia y amor. Cuando necesito algo para mis hijos o para mí, prefiero mil veces comprar lo que vende otra mamá, reutilizado y en perfecto estado, que irme a una tienda o caer en el fast fashion de los supermercados”.Recalca también lo importante que es elegir prendas básicas y de buena calidad y confección. “Te van a durar más tiempo, no pasan de moda y evitas el sobreconsumo. Esos son los valores detrás de OhCotton”. Cuenta que, si bien en periodos de más demanda, acude a la ayuda de otra persona, ella está a cargo de todo el proceso. “No delego la confección total, sigo siendo yo la que corta las telas, pega botones, repasa detalles, y si necesito rehacer algo porque no pasa mis parámetros de calidad, lo hago. Prefiero eso, que vender algo que no me deja ciento por ciento contenta”.
Reconoce que tampoco le interesa la producción en masa. Quiere ocupar el recurso necesario, no consumir de más, ni telas ni energía. “OhCotton no aspira a la masividad, prefiero contar con diseños interesantes y acotados. Me gusta la calidad de lo que hago y entrego, por eso siento sería complejo pensar en llegar a procesos productivos masivos. No me gustaría cambiar la calidad de mi ropa ni dejar de revisar cada prenda con mis propias manos”.
Si bien OhCotton nació como una línea de vestuario infantil, de a poco ha ido sumando ropa de mujer y una línea home. Actualmente también hay vestidos, jardineras y blusas de mujer, y unos conjuntos match madre e hija que son una ternura. Para el hogar, mantelería y ropa de cama.
“Mi sueño es vivir de esto, ser independiente. Siento que cuando partes haciendo las cosas para alguien que amas tanto como tu hija, y desde ahí crece un proyecto, no puede salir mal. Esta marca tiene mucho o todo de mí, sobre todo el cariño por la ropa, por las cosas bien hechas y en forma honesta”, concluye Isidora.
¿Dónde comprarlas? Por el momento en su cuenta en Instagram, pero pronto sacará tienda virtual.
*Soledad Torres D es Periodista, mamá de dos, fiel a la idea de dar una segunda vida a la ropa y cambiar el verbo. Síguela en su cuenta en Instagram en @mama_reutiliza_
(Fotos gentileza de OhCotton)
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